Espejo de Tera es un pueblo pequeño por el que paseamos bajo una lluvia con viento bastante fresquito. El rio Tera andaba un poco desbordado debido a las lluvias constantes de los últimos días, lo cruzamos por el puente romano, y vimos como los vecinos preparaban sus buenos montones de leña. También había algún apero bastante viejo en la calle, y me gustó mucho el gran tronco hueco que adornaba un pequeño parque. Como no estaba la mañana muy apacible dimos una vuelta por el pueblo y de nuevo al coche. ¡La cantidad de musgo que había por todas partes!
No hay comentarios:
Publicar un comentario